Propaganda alarmista y mentirosa contra Rusia

Por Ricardo Esquivel Castañeda.

Desde hace ya varias semanas está apareciendo en la prensa Occidental toda una campaña antirrusa, alarmista y mentirosa, donde se dice que este país invadirá a Ucrania. Veamos qué se dice al respecto, “Rusia mueve sangre para transfusiones cerca de Ucrania”, “se alistan para lo peor en Ucrania”, “EE.UU. pone en alerta a 8 mil 500 soldados mientras Rusia realiza nuevas maniobras militares cerca de Ucrania”, “Rusia-Ucrania: una invasión rusa podría comenzar «en cualquier momento», advirtió Estados Unidos” y de lo más recuente, “EU calcula que Rusia tiene hasta 190 mil soldados cerca de Ucrania”.

Como se puede ver, toda esta campaña falsa y de odio contra Rusia busca poner como culpable de todo a los rusos, de ser los agresores, de ser los que quieren desmembrar más a Ucrania, de poner a aquel país ante la gente desorientada del mundo como el diablo mismo, y sobre todo, busca ganar simpatía para los EE.UU., ya que de esa manera, una vez teniendo a la gente convencida a base de rumores y de peligros imaginarios de que los rusos son los malos, de esa manera justificar su intervención militar en la zona, bajo la bandera de libertad, defendiendo a los ucranianos de las garras del “tiránico” de Putin y erigirse ellos como los defensores de los derechos humanos ante el mundo.

Para algunos, esta campaña de mentiras a leguas se descubre, pero, para muchos ciudadanos que aún están bajo la influencia de los medios de comunicación occidentales no, por ello, es muy importante intentar ubicar qué es lo que realmente está sucediendo en Ucrania.

El problema surge desde el 2014 cuando se produjo el golpe de Estado en Ucrania impulsado por EE. UU. donde se destituye al presidente Víctor Yanukóvich y toman el poder las fuerzas de extrema derecha y grupos fascistas, paralelamente a esto, surgen también como respuesta al golpe, las Repúblicas Populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL), ubicadas en la frontera con Rusia y donde la mayoría de sus habitantes son de origen ruso, hecho que ha pesado en la decisión de dar una relación más estrecha con Rusia y no hacia la OTAN.

La confrontación de las repúblicas rebeldes con el estado ucraniano ha desatado una guerra civil con el resultado de más de 10 mil muertos, situación que el presidente Vladimir Putin ha llamado como genocidio en el Donbass. O sea que, la guerra en esa zona busca hacer una limpieza étnica de los rusos y ponerla bajo el poder de Ucrania.

Ante este contexto, está claro que Rusia se ve arrastrada para apoyar y hacer que se respete la decisión y voluntad de las Repúblicas independientes ya mencionadas, porque quienes tomaron el poder en Ucrania son extremistas de derecha, fanáticos del nazismo y alentados por EE.UU. para atacar a las repúblicas separatistas y de paso, como objetivo final, cercar con las armas a Rusia para someterla.

Lo que se esta viendo pues, no es la defensa de los derechos humanos del pueblo ucraniano, no, nada de eso esta pasando allá, lo que realmente está pasando es que el imperialismo Yanqui esta entrando a la etapa de decadencia y agotamiento, como sucedió con todos los grandes imperios que han existido en el mundo; su etapa de hegemonía y esplendor llega a su fin, su agresividad e intervencionismo, connatural en él lo han llevado a su máximo desarrollo, sometiendo países débiles, saqueando sus recursos naturales y destruyéndolos ahí donde encuentra oposición, y como resultado de su mismo actuar, han surgido también países poderosos como Rusia y China que no están dispuestos a ser países saqueados y desmembrados por el imperialismo porque tienen otro camino para sus pueblos, totalmente diferente a los de los Estados Unidos.

En resumen, la gente debe de saber que ahí donde meten las manos los americanos, no es porque se busque la libertad, el respeto a la democracia y a los derechos humanos, la historia así nos lo ha dicho pero es todo lo contario, busca cómo implantar el poder de los grandes monopolios, de las grandes empresas americanas para explotar la mano de obra y materias primas de los pueblos conquistados.

El señalar a Rusia como una agresora contra Ucrania es una mentira abierta y descarada, busca cómo justificar un caos en Ucrania para intervenir militarmente y someter a Rusia. Esa es la verdad de las cosas, no lo que dice la prensa occidental.