La salud mental desde la perspectiva del “Guasón”

REDESCUBRIENDO

Por: José Miguel Cuevas Delgadillo

  • Las afectaciones mentales de los individuos son el reflejo de una sociedad en decadencia

Anónimo.

“Joker” del inglés, mejor conocido en el mundo latino como “Guasón”. Es el título de la película que está causando gran expectativa entre las sociedades latinoamericanas. La película es dirigida por Todd Phillips a partir de un guion que escribió con Scott Silver, y protagonizada por Joaquín Phoenix, junto con Robert De Niro y otros actores. La trama se lleva a cabo en la oscura y decadente ciudad “Gótica” en donde vive el personaje junto con su madre en un apartamento deteriorado por el tiempo. Un análisis superficial de la conducta de Arthur Fleck (el nombre del personaje en la película) es decir que su conducta es provocada exclusivamente por su condición mental, sin embargo, el filme nos revela aspectos muy perturbadores de la sociedad en donde crece y se desenvuelve el propio personaje. Las reseñas sobre las enfermedades mentales que padecía “Joker” publicadas en los últimos días, reducen la realidad del personaje y su conducta a su miserable condición mental, no obstante, la película nos da pistas sobre el contexto social decadente que es responsable, en parte, de la conducta delincuencial de “Joker”.

Enfermedades mentales de “Joker”.

En la película, el personaje tiene un síntoma recurrente: risa involuntaria e incontrolable que se manifiesta cuando es sometido a un evento estresante o cuando es confrontado, ofendido o atacado. De hecho, hay una escena de la película en la que Arthur le entrega a una señora en el transporte público una tarjeta con una especie de “disculpa”. La tarjeta explica que Arthur ríe involuntariamente debido a que padece varias enfermedades mentales. Esta escena es significativa, ya que de ella se desprende que Arthur recibe atención social de lo que aparentemente es una institución de gobierno. Arthur acude varias veces para ser monitoreado sobre su vida cotidiana y recibir su medicamento que le otorgan de forma gratuita. Diferentes estudios sobre la risa patológica establecen que puede ser unsíntomade diferentes trastornos psiquiátricos o neurológicos: “La risa puede ser un síntoma de algunos tipos de epilepsia, es un símil de las convulsiones que puede tener una persona con esta enfermedad. Hay diferentes tipos de reacciones en el cuerpo dependiendo de dónde haya un daño neurológico, cuando se activa esa conexión que está mal hecha en el cerebro se puede desatar risa o llanto”, refiere la psicoterapeuta clínica Karime Fajer. “La risa involuntaria también puede ser un síntoma en episodios maníacos, en trastorno bipolar no tratado y también puede verse en episodios psicóticos, puede ser unamanera de contrarrestar el llanto, la siguiente reacción que el cuerpo conecta a la expresión emocional es la risa”.

     La afectación se conoce como síndrome de afecto pseudobulbar: “se considera patológica la risa sin motivo que puede aparecer en enfermedades neurológicas como la parálisis bulbar y pseudobulbar, intoxicaciones, pero la forma más frecuente de risa patológica se da en la esquizofrenia, a veces como respuesta a las alucinaciones auditivas y otras veces porque el paciente siente como si le obligasen a reír”, señala el sitio especializado psiquiatría.com. Si hay tantas enfermedades con risa involuntaria como síntoma, ¿entonces cuál o cuáles son las enfermedades mentales de Joker?

     Psicosis. “Alguien que es psicótico experimenta alucinaciones auditivas, como escuchar voces o música; alucinaciones visuales, donde ven objetos que no están realmente allí; o tener pensamientos delirantes”. (H. Eric Bender, 2019). Psicopatía. “La psicopatía refleja características y conductas interpersonales que a menudo se basan en la falta de empatía. En los cómics, programas de televisión y películas, el Joker es mucho más parecido a un psicópata y no a un psicótico”, señaló el especialista. Pero el trastorno que más se ajusta a los rasgos del Joker de Todd Phillips y Joaquin Phoenix es: el trastorno de personalidad antisocial este trastorno se caracteriza por: “Una incapacidad individual de adaptarse a las normas sociales. Esas normas sociales son muy importantes porque gobiernan muchos aspectos del desarrollo en la adolescencia y la adultez. “Los pacientes con trastorno de personalidad antisocial característicamente muestran fácilmente irritabilidad y sentimientos agresivos hacia los demás, los cuales se expresan en el contexto de la amenaza o la intimidación”, señala un estudio del Instituto Nacional de Psiquiatría “Ramón de la Fuente Muñiz”. Entre las causas de este trastorno hay factores genéticos, pero también factores externos como el maltrato infantil, provenir de una familia con padres alcohólicos o con alguna enfermedad mental.

El contexto social decadente (Anomia).

Todd Phillips muestra la decadencia que representa ciudad “Gótica”: delincuencia, pobreza, ingobernabilidad, recortes a los programas de gobierno, discriminación y resentimiento social. En ese ambiente es que “Joker” crece, vive y se desenvuelve. Athtur Fleck vive con su mamá y trabaja como payaso callejero de donde obtiene ganancias, sin embargo, por su condición mental es despreciado, maltratado y humillado por la gente que lo rodea, a excepción de su madre. Tres eventos estresantes desencadenan que Arthur se deteriore y que su percepción de la realidad se altere, lo que provocará que progresivamente su conducta se vea alterada y su condición mental se complique: el cierre de la institución que lo atiende y la cancelación de  los medicamentos que consume, el descubrimiento que su papá es el magnate y candidato a alcalde de la ciudad y el ocultamiento de aspectos de su infancia ocultados por su madre. Ante dichos acontecimientos, Arthur Fleck, ve su condición mental deteriorada y eventualmente su sistema emocional más vulnerable. Después de que deja de consumir sus medicamentos, asesina a tres hombres miembros de la bolsa en Wall Street. Lo que no debemos dejar de observar en la trama es como la sociedad discriminatoria y decadente provoca que el personaje, juntamente con los síntomas de sus enfermedades mentales, se convierta en un resentido y posteriormente en un multi-homicida. El mensaje es claro: la sociedad carente de regulación social genera sus propios enfermos mentales, o como lo establece el sociólogo Émile Durkheim en su término Anomia: “Un estado sin normas que hace inestables las relaciones del grupo, impidiendo así su cordial integración». En este sentido, el término anomia que se emplea en sociología para referirse a una desviación o ruptura de las normas, es también utilizado para señalar las sociedades o grupos en el interior de una sociedad que sufren un caos debido a la ausencia de reglas de buena conducta comúnmente admitidas, implícita o explícitamente, o peor: debidas al reinado de reglas que promueven el aislamiento o incluso el pillaje más que la cooperación. Hasta la próxima. Twitter: @redescubriendo Facebook: Miguel Cuevas.